A continuación os hablaré del miedo y estrategias para ayudar a vuestros hijos a vencerlos.
Finalmente, contaré qué actividades podemos trabajar a través del vídeo.
Espero que os guste.
- Por imitación. Los niños observan muchísimo las conductas de sus padres o cuidadores. La forma en la que reaccionan sus progenitores ante determinadas situaciones les va a condicionar en un futuro en sus interpretaciones y conductas. Por ejemplo: si veo a mi madre tensa cuando nos quedamos solos por la noche copio ese comportamiento. Si mi padre se pone nervioso cuando ve un murciélago por la noche puedo imitar ese comportamiento. Muchos miedos se educan, contagian e imitan.
- Uso excesivo de verbalizaciones negativas de los adultos. Cuando un adulto que está con un niño se expresa de manera cotidiana usando muchas expresiones como ¡no, cuidado es peligroso!, ¡quieto!, ¡para!, promueve el desarrollo de personalidades inseguras, con miedo a hacer cosas por sí solos y a ver peligros en situaciones que no lo tienen.
- Experiencias traumáticas que el propio niño ha vivido: que le muerda un perro, quedarse mucho tiempo encerrado en un ascensor, que roben en su casa, presenciar un accidente…
- Primera infancia (6 meses a 2 años): Pueden temer a los desconocidos e incluso sentir ansiedad ante la ausencia de los padres, pero en general estos miedos son positivos y pueden indicar, incluso, una cierta madurez.
- Etapa preescolar (2 a 6 años): Pueden entrar en escena estímulos imaginarios y los miedos pueden hacerse algo más abstractos (fantasmas, monstruos, etc.). El miedo a los animales se desarrolla en esta etapa.
- Etapa escolar (de 7 a 11 años): los miedos comienzan a ser menos imaginarios y más basados en la realidad. Puede aparecer el miedo a daños físicos, a los accidentes, a los tratamientos médicos, a que los padres se separen, si el ambiente familiar no es propicio.
- No ignores su miedo. Apóyale y dale tranquilidad para gestionar esta emociones.
- Habla con naturalidad de lo que le da miedo. Ofrécele estrategias para que, poco a poco, vaya venciéndolo (respirar profundamente, pensar en cosas agradables). Realiza juegos sobre el tema. Por ejemplo, si tiene miedo a la oscuridad hacer una gymkana con pruebas divertidas por la noche con una linterna por la casa. También puedes usar cuentos, vídeos, películas.
- No sobreprotejas sus reacciones, porque así refuerzas esta actitud.
- No ridiculices sus miedos.
- Cuéntale que tu también tuviste miedos de pequeño e incluso a veces de mayor aprovecha para darle seguridad y contarle tus estrategias.
- No le castigues aunque su respuesta haya sido desmesurada ante un miedo concreto. Necesita tu apoyo y comprensión.
- Ayúdale a que se vaya enfrentando a sus miedos de forma progresiva para que vaya ganando en seguridad. Por ejemplo: Si tiene miedo al agua no puedes lanzarle a la piscina pero si meterte con él poco a poco.
Ejercicios prácticos:
- Cuando no saben escribir: cuando os digan que tienen miedo a algo explicarles que es un pensamiento negativo que no les hace sentir bien y ayudarles a pensar en cosas divertidas o agradables. Puede verbalizarlas para que vosotros sepáis si lo está haciendo bien. Posteriormente analizar que el miedo se ha ido porque ha pensado en otra cosa.
- Cuando ya saben escribir: elaborar juntos un diario donde escriba su miedo y cuente sus logros para que vea su evolución y cómo lo supera.
Referencias bibliográficas:
- Bisquerra, R. (2000). Educación emocional y bienestar. Barcelona. Praxis.
- Bisquerra R. (2009). Psicopedagogía de las emociones. Madrid: Síntesis.
- López, F. Etxebarría, I., Fuentes, M.J., Ortiz, M.J. (Cood.) (1999) Desarrollo afectivo y social. Madrid. Pirámide.
- Maurice J. Elias, Steven E. Tobias y Brian S. Friedlander. (1999). EDUCAR CON INTELIGENCIA EMOCIONAL, editorial de Bolsillo Clave.
Por último, os comento las actividades que podéis realizar con los niños a través del vídeo de Piper.
- Hablar sobre el vídeo después de verlo: ¿dónde está Piper?, ¿qué es Piper?, ¿qué es lo que más le ha gustado?, ¿qué le pasaba a Piper?, ¿cómo se ha sentido a lo largo del corto en las distintas situaciones que le han ido pasando?, ¿cómo le ha ayudado su mamá?…
- Hacer dramatizaciones sobre el vídeo. Convertiros en correlimos podéis invertir los papeles. Ellos pueden hacer de la mamá. También podéis ser Piper y su nuevo amigo el cangrejo. Se lo pasarán genial.
- Realizar un dibujo de lo que más le ha gustado.
- Buscar información en internet de los correlimos y aprender un poco más sobre ellos.
- Realizar una actividad plástica muy divertida.
Yo os enseño la mía.